Sencillamente soy Gerardo… sin adjetivos ni apellidos, en estado puro.
Consciente que durante este camino siempre se puede mejorar. Pero con el compromiso de dar libertad a la palabra con fe, esperanza y amor… ¡sin límites!.
Rindiéndome al amor como la mayor fuente de mi inspiración, sin excepción por ninguno de los matices a los que nos enfrentamos cuando el corazón siente.
Este blog es una ventana abierta para leer historias de la vida misma, algunos con recorridos cortos y otros largos; con el único interés llegar a convertirse en un oasis por tan dulce mal.